Definición

Es el tipo de cáncer cutáneo más peligroso. Afecta las células que producen la pigmentación (melanina), la cual es responsable del color de la piel y del cabello, también puede afectar también el área pigmentada del ojo.

Causas, incidencia y factores de riesgo   

Existen cuatro tipos principales de melanoma:

Melanoma de extensión superficial es el tipo más común en los países del norte. Generalmente es plano e irregular en forma y color y varía entre diferentes tonos de negro y café. Puede ocurrir a cualquier edad y en cualquier parte del cuerpo y tiene una mayor incidencia en las personas de raza blanca.

Melanoma nodular generalmente empieza como un área elevada de color azul-negro oscuro o rojo-azulado, aunque algunos no tienen color.

Melanoma léntigo maligno generalmente aparece en las personas mayores. Ocurre más comúnmente en la piel dañada por el sol, en la cara, cuello y brazos. Las áreas de la piel que presentan anomalías son grandes, planas y de color bronceado con manchas cafés.

Melanoma lentiginoso acral en el Instituto Nacional de Cancerología constituye el 50% de todos los melanomas. Generalmente ocurre en las palmas de las manos, las plantas de los pies o por debajo de las uñas y tiene una mayor incidencia en las personas de raza negra, latina y asiática.

El melanoma puede diseminarse con mucha rapidez y es la forma más mortal de cáncer cutáneo. Aunque es menos común que otros tipos de cáncer cutáneo, su incidencia está en constante aumento. Es la causa principal de muerte entre las enfermedades de la piel.

En los Estados Unidos, 1 de cada 85 personas desarrollará melanoma en algún momento de su vida. Los riesgos de desarrollar un melanoma aumentan con la edad, aunque frecuentemente afecta a jóvenes, por lo demás sanos. El melanoma es la causa número uno de muerte por cáncer en mujeres entre los 25 y los 30 años de edad, en los países del norte,

Puede aparecer en piel sana o puede presentarse en un lunar u otra área de la piel que cambió de apariencia. Algunos lunares presentes desde el nacimiento pueden convertirse en melanomas.

El desarrollo de un melanoma tiene una relación directa con la exposición al sol, especialmente durante la niñez y es más común entre personas de piel clara, ojos azules o verdes y cabello rojo o rubio.

En condiciones normales, se pueden observar lunares en las plantas. Sin embargo, es importante consultar al dermatólogo porque se pueden confundir con el melanoma de las plantas y palmas que se conoce como melanoma acral lentiginoso. Esta variedad de melanoma es muy frecuente en la población colombiana.

Los factores de riesgo son, entre otros:

• Antecedentes familiares de melanoma
• Cabello rojo o rubio y piel clara
• Presencia de múltiples marcas de nacimiento
• Aparición de pecas evidentes en la parte superior de la espalda
• Tres o más episodios de quemaduras de sol con ampollas antes de los 20 años de edad
• Tres años o más dedicados a un empleo de verano al aire libre durante la adolescencia
• Altos niveles de exposición a la luz solar fuerte

Síntomas   

El síntoma principal de cualquier cáncer cutáneo es generalmente un lunar, una llaga, un bulto o un tumor sobre la piel. Cualquier cambio en el aspecto de una lesión pigmentada de la piel, con el tiempo es una señal de advertencia. También debe observarse cualquier sangrado de un tumor cutáneo.

El sistema ABCDE puede ayudar al paciente a recordar las características que pueden ser síntomas de un melanoma:

• Asimetría: Una mitad del área anormal es diferente de la otra mitad.
• Bordes: Bordes irregulares.
• Color: El color varía de un área a otra, con tonos bronce, café o negro (algunas veces blanco, rojo o azul). Una mezcla de colores puede aparecer dentro de una misma lesión.
• Diámetro: Es mayor de 6mm (pero no siempre): como el tamaño de un borrador de lápiz.

 

 

 

 

 

• [1] El Melanoma localizado en las plantas, es muy frecuente en la población Colombiana que se caracteriza por tener una piel de color trigueña, morena y negra
• [2]Este tipo de Melanoma conocido como léntigo Maligno es frecuente encontrarlo en adultos mayores y personas de la tercera edad y su localización típica es en el rostro como el ejemplo que se ilustra.
• [3]La foto ilusgtra un tipo de Melanoma que se origina de la matriz de la uña. Es importante consultar a su dermatólogo cuando se presente caulquier tipo de coloración de la uña

[4] Esta foto muestra un Léntigo Maligno. En su fase inicial este cáncer puede confundirse con otras manchas del rostro muy frecuentes en los adultos mayores y ancianos

Elevación

El éxito para el tratamiento del melanoma es el reconocimiento temprano de los síntomas. Se deben realizar auto-exámenes regularmente, ya que no se puede detectar un punto pequeño si no se busca con detenimiento.

Signos y exámenes   

Se debe acudir al médico lo más pronto posible si una persona nota cualquier marca sospechosa sobre la piel.

La American Cáncer Society recomienda hacerse examinar la piel por parte de un profesional cada año para las personas mayores de 40 años y cada 3 años para las personas de 20-40 años. También recomiendan auto-examinarse mensualmente.

El médico puede sospechar de un melanoma basado en la apariencia del tumor, llaga o protuberancia. Puede realizarse una biopsia para confirmar el diagnóstico. La biopsia puede involucrar la extirpación parcial o total del tumor.

Las lesiones pigmentadas que aparecen en el rostro de las personas de la tercera edad son muy frecuentes y la gran mayoría de ellas corresponden a lesiones benignas, como el ejemplo que ilustramos, se trata de una queratosis seborreica. Sin embargo, los pacientes deben consultar porque estas lesiones son diagnóstico diferencial con el melanoma, que es uno de los cánceres frecuentes de la piel.

Tratamiento   

Generalmente, es necesaria la extirpación quirúrgica de las células cancerosas y de una porción de piel normal circundante. Es posible que se deba hacer un procedimiento denominado ganglio centinela,  para observar si el cáncer se ha diseminado a ganglios linfáticos aledaños, los cuales posiblemente también deban ser extirpados. Igualmente, es probable que sea necesario colocar un injerto de piel después de la cirugía en caso de resultar afectada un área considerable de piel.

Sólo los melanomas más pequeños y superficiales se pueden curar por medio de la cirugía únicamente, por esto es importante hacer un diagnóstico oportuno. Además de la cirugía en los estados más avanzados, son recomendables la radioterapia, la quimioterapia o la inmunoterapia (el uso de medicamentos que estimulan el sistema inmune, como el interferón).

Si el melanoma tiene más o igual de 4mm de grosor o si los ganglios linfáticos tienen cáncer, existe un alto riesgo de que el cáncer se disemine a otros tejidos y órganos. El uso del interferón después de la cirugía puede ser de gran ayuda para estos pacientes. Los estudios han demostrado que el interferón mejora las probabilidades de cura en aproximadamente 10%.

Sin embargo, el interferón tiene muchos efectos secundarios y algunas veces es difícil de tolerar. Los pacientes con melanomas de alto riesgo deben considerar la posibilidad de participar en pruebas clínicas (investigaciones de nuevos medicamentos u otros tratamientos).

Para los pacientes cuyo melanoma se ha diseminado más allá de la piel y de los ganglios linfáticos hacia otros órganos, el tratamiento es más difícil. En este punto, el melanoma generalmente no tiene cura. El tratamiento está dirigido usualmente a disminuir el tamaño del tumor y a mejorar los síntomas. Se puede ensayar la aplicación de quimioterapia y el uso de interferón o interleucina. Estos pacientes también deben considerar la posibilidad de participar en pruebas clínicas.

Expectativas (pronóstico)   

El éxito del tratamiento depende de muchos factores, tales como el estado general de salud del paciente y de si el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos u otros órganos.

Si se descubre en etapa temprana, el melanoma tiene cura. Los riesgos de que el cáncer vuelva a aparecer dependen del grosor del tumor: los tumores más gruesos tienen una mayor probabilidad de ser recurrentes. Si el cáncer ya se ha diseminado a los ganglios linfáticos, existe una mayor probabilidad de que el melanoma vuelva a aparecer.

El índice de cura de los melanomas que se han diseminado a otros tejidos y órganos es bajo. El melanoma que se ha diseminado puede llevar a la muerte.

Complicaciones   

Las complicaciones de un melanoma incluyen las siguientes:

• Diseminación a otros órganos
• Daño al tejido profundo
• Efectos secundarios del tratamiento
  • Náuseas
  • Pérdida del cabello
  • Fatiga
  • Dolor

La muerte se puede presentar en las etapas avanzadas de un melanoma que se ha diseminado.

Situaciones que requieren asistencia médica   

Se debe buscar asistencia médica si los síntomas indican la presencia de un melanoma, particularmente:

• Si una lesión de piel ya existente presenta cambios en color, tamaño, textura o aspecto.
• Si la persona experimenta dolor, inflamación, sangrado o picazón en dicha lesión.

Prevención   

Se recomienda la protección del daño que las dosis regulares de rayos ultravioletas pueden producir. Las siguientes son algunas recomendaciones:

• Utilizar diariamente un buen protector solar FPS 20 o mayor (también durante los meses de invierno)
• Utilizar ropa protectora, como sombreros y gafas para el sol
• Abstenerse de acostarse intencionalmente bajo el sol o de usar productos bronceadores
• Minimizar la exposición al sol
  • Especialmente en las vacaciones.
  • Particularmente entre las 10:00 a.m. y las 3:00 p.m.